Por: Cayetano Ramírez, Domingo, 07 de Octubre de 2007
En la marcha a Cristo Rey, el arzobispo de León pidió orar por el rumbo de México
SILAO
Cerca de diez mil jóvenes provenientes de diferentes municipios de la entidad refrendaron su fe católica ante el monumento a Cristo Rey, en el Cerro del Cubilete.
El arzobispo de la Arquidiócesis de León, José Guadalupe Martín Rábago dijo a los presentes que el “hoy en día los jóvenes necesitan realizar un alto a la vida” y reflexionar en torno a lo que se está haciendo bien y lo que se están realizando bien los diferentes sectores de la sociedad.
Caminata de insolación y fe
Cayetano Ramírez / SILAO
Con sueño y el cansancio reflejado en los rostros cerca de diez mil jóvenes de la Arquidiócesis de León participaron en la XXIII marcha juvenil del Cerro del Cubilete en honor a Cristo Rey.
Debido al intenso calor y los candentes rayos del sol, algunos de los jóvenes sufrieron insolaciones y desvanecimientos pero rápidamente fueron auxiliados por paramédicos de la Cruz Roja, Protección Civil e instituciones de rescate.
Desde la noche del viernes inició la llegada de los 260 autobuses al lugar conocido como la Ermita, ubicada donde empieza la subida al Cerro.
Apenas empezaba a amanecer y algunos de los jóvenes iniciaron el camino sobre la carretera de empedrado portando leyenda pintadas en mantas.
Algunos de los jóvenes aseguraron que para ellos ya es una tradición tomar parte en la marcha juvenil de cada año otros señalaron que es fortificante realizar un esfuerzo para al final del camino reunirse con Jesucristo.
Durante la subida al Cubilete algunos de los jóvenes rezaban, otros se daban ánimos entre sí para no desistir.
Algunos de los jóvenes vencidos por el sueño y elcansancio buscaron alguna sombra debajo de árboles para ahí sentarse a tomar un descanso en los pies.
Mientras algunos escuchaban la misa ofrecida por el arzobispo, José Guadalupe Martín Rabago otros aprovecharon para comprar aguas embotelladas, refrescos o frutas para comer algo mientras se llegaba la hora de abordar de nueva cuenta los autobuses estacionados en las faldas del Cerro del Cubilete.
En la subida a Cristo Rey algunos integrantes de un a peregrinación proveniente de Tultepec, estado de México distribuyeron líquidos en botellas a los peregrinos que subieron caminando, en bicicletas y corriendo ante los pies de Cristo de la Montaña.
Luego de llegar hasta el convento, donde se ofreció la misa a los peregrinos algunos buscaron lugares para descansar, mientras algunos otros solamente buscaron en donde taparse los rayos del sol y luego se acostaron hasta sobre el empedrado de la carretera para reponer fuerzas antes de proseguir sus caminos a la capital del estado o sus lugares de origen.
Luego del salud de paz un grupo de sacerdotes ofreció la eucaristía a muchos de los jóvenes e integrantes de familias que participaron en la XXIII edición de la marcha juvenil en donde participan miles de jóvenes originarios de diferentes lugares del estado y de otros lugares del país.
Durante la marcha juvenil solamente se registraron algunos desvanecimientos y deshidrataciones en algunos de los jóvenes.
Quienes presentaron este tipo de situaciones fueron auxiliados por paramédicos de la Cruz Roja, Protección Civil del estado, Protección Civil Municipal, Bomberos, Seguridad Pública municipal.
Antes del mediodía elementos adscritos a Tránsito y Transporte del Estado y algunos cadetes con las insignias ya extinta Policía Estatal de Caminos evitaron que los conductores de vehículos llegaran a la zona conocida como Las Antenas, argumentando que la parte de arriba estaba llena de autobuses.
Aun y cuando el tráfico de autobuses fue mucho menor que otros años, elementos de Tránsito del Estado negaron el paso a todo tipo de vehículos, lo cual causo molestia entre las familias que con personas de la tercera edad y con niños intentaban llegar a los pies de Cristo Rey para pagar alguna manda.Consideró que "sabemos que muchos de ustedes ni siquiera han dormido ni descansado por viajar desde la noche del viernes hasta las faldas de este el cerro de Cristo Rey a donde la mayoría de ustedes llegaron para refrendar su fe católica ante los pies de cristo".
Dijo que “muchos de ustedes están cansados pero su fe los ayudó a llegar hasta este lugar en donde se reunieron sin importar las inclemencias del tiempo con el propósito de participar en la misa y recibir el cuerpo de cristo a través de la comunión”.
El arzobispo, José Guadalupe Martín Rábago consideró que la fe católica transforma a los miles de jóvenes que desde hace 23 años llegan hasta los pies de cristo rey durante la marcha juvenil.
Explicó que la fe interior de los jóvenes puede mover montañas porque quienes creen en Cristo pueden obtener la vida eterna. Durante la misa celebrada a las 12: horas en el convento del Cerro del Cubilete el sacerdote pidió a los jóvenes congregados relevar oraciones por la paz en el mundo en donde cada vez es más la violencia que se vive entre los seres humanos.
Consideró que en estos tiempos “es importante rezar para que nuestros gobernantes tomen las decisiones correctas puesto que son quienes reflejan todo lo que está sucediendo o pueda suceder en las ciudades en donde vivimos o en el esta nación que es una de más grandes y pobladas del mundo”.
Pidió a los presentes elevar oraciones por las personas que viven en los lugares que han sido azotados por situaciones naturales como inundaciones, desbordamientos de los ríos y presas en donde muchas personas han muerto y otras han perdido todos sus patrimonios que reunieron, tras años de esfuerzo.
Explicó que " luego de haber llegado hasta este lugar, donde nos hemos reunido sin importar las clases sociales o el color de la piel, nuestra fe se a renovado porque hemos recibido a Cristo nuestro Señor".
Finalmente solicitó a los jóvenes “comportarse”, ya que en años anteriores muchos de los jóvenes luego de refrendar su fe católica llegan a otros lugares donde perdían la cordura.
Abundó que no es bueno realizar situaciones antisociales en durante sus regresos a casa ni abusar de las bebidas alcohólicas puesto que los jóvenes que integran la marcha deben recordar que llegaron hasta el Cerro del Cubilete para comprometerse ante cristo rey a ser mejores personas.
En la marcha a Cristo Rey, el arzobispo de León pidió orar por el rumbo de México
SILAO
Cerca de diez mil jóvenes provenientes de diferentes municipios de la entidad refrendaron su fe católica ante el monumento a Cristo Rey, en el Cerro del Cubilete.
El arzobispo de la Arquidiócesis de León, José Guadalupe Martín Rábago dijo a los presentes que el “hoy en día los jóvenes necesitan realizar un alto a la vida” y reflexionar en torno a lo que se está haciendo bien y lo que se están realizando bien los diferentes sectores de la sociedad.
Caminata de insolación y fe
Cayetano Ramírez / SILAO
Con sueño y el cansancio reflejado en los rostros cerca de diez mil jóvenes de la Arquidiócesis de León participaron en la XXIII marcha juvenil del Cerro del Cubilete en honor a Cristo Rey.
Debido al intenso calor y los candentes rayos del sol, algunos de los jóvenes sufrieron insolaciones y desvanecimientos pero rápidamente fueron auxiliados por paramédicos de la Cruz Roja, Protección Civil e instituciones de rescate.
Desde la noche del viernes inició la llegada de los 260 autobuses al lugar conocido como la Ermita, ubicada donde empieza la subida al Cerro.
Apenas empezaba a amanecer y algunos de los jóvenes iniciaron el camino sobre la carretera de empedrado portando leyenda pintadas en mantas.
Algunos de los jóvenes aseguraron que para ellos ya es una tradición tomar parte en la marcha juvenil de cada año otros señalaron que es fortificante realizar un esfuerzo para al final del camino reunirse con Jesucristo.
Durante la subida al Cubilete algunos de los jóvenes rezaban, otros se daban ánimos entre sí para no desistir.
Algunos de los jóvenes vencidos por el sueño y elcansancio buscaron alguna sombra debajo de árboles para ahí sentarse a tomar un descanso en los pies.
Mientras algunos escuchaban la misa ofrecida por el arzobispo, José Guadalupe Martín Rabago otros aprovecharon para comprar aguas embotelladas, refrescos o frutas para comer algo mientras se llegaba la hora de abordar de nueva cuenta los autobuses estacionados en las faldas del Cerro del Cubilete.
En la subida a Cristo Rey algunos integrantes de un a peregrinación proveniente de Tultepec, estado de México distribuyeron líquidos en botellas a los peregrinos que subieron caminando, en bicicletas y corriendo ante los pies de Cristo de la Montaña.
Luego de llegar hasta el convento, donde se ofreció la misa a los peregrinos algunos buscaron lugares para descansar, mientras algunos otros solamente buscaron en donde taparse los rayos del sol y luego se acostaron hasta sobre el empedrado de la carretera para reponer fuerzas antes de proseguir sus caminos a la capital del estado o sus lugares de origen.
Luego del salud de paz un grupo de sacerdotes ofreció la eucaristía a muchos de los jóvenes e integrantes de familias que participaron en la XXIII edición de la marcha juvenil en donde participan miles de jóvenes originarios de diferentes lugares del estado y de otros lugares del país.
Durante la marcha juvenil solamente se registraron algunos desvanecimientos y deshidrataciones en algunos de los jóvenes.
Quienes presentaron este tipo de situaciones fueron auxiliados por paramédicos de la Cruz Roja, Protección Civil del estado, Protección Civil Municipal, Bomberos, Seguridad Pública municipal.
Antes del mediodía elementos adscritos a Tránsito y Transporte del Estado y algunos cadetes con las insignias ya extinta Policía Estatal de Caminos evitaron que los conductores de vehículos llegaran a la zona conocida como Las Antenas, argumentando que la parte de arriba estaba llena de autobuses.
Aun y cuando el tráfico de autobuses fue mucho menor que otros años, elementos de Tránsito del Estado negaron el paso a todo tipo de vehículos, lo cual causo molestia entre las familias que con personas de la tercera edad y con niños intentaban llegar a los pies de Cristo Rey para pagar alguna manda.Consideró que "sabemos que muchos de ustedes ni siquiera han dormido ni descansado por viajar desde la noche del viernes hasta las faldas de este el cerro de Cristo Rey a donde la mayoría de ustedes llegaron para refrendar su fe católica ante los pies de cristo".
Dijo que “muchos de ustedes están cansados pero su fe los ayudó a llegar hasta este lugar en donde se reunieron sin importar las inclemencias del tiempo con el propósito de participar en la misa y recibir el cuerpo de cristo a través de la comunión”.
El arzobispo, José Guadalupe Martín Rábago consideró que la fe católica transforma a los miles de jóvenes que desde hace 23 años llegan hasta los pies de cristo rey durante la marcha juvenil.
Explicó que la fe interior de los jóvenes puede mover montañas porque quienes creen en Cristo pueden obtener la vida eterna. Durante la misa celebrada a las 12: horas en el convento del Cerro del Cubilete el sacerdote pidió a los jóvenes congregados relevar oraciones por la paz en el mundo en donde cada vez es más la violencia que se vive entre los seres humanos.
Consideró que en estos tiempos “es importante rezar para que nuestros gobernantes tomen las decisiones correctas puesto que son quienes reflejan todo lo que está sucediendo o pueda suceder en las ciudades en donde vivimos o en el esta nación que es una de más grandes y pobladas del mundo”.
Pidió a los presentes elevar oraciones por las personas que viven en los lugares que han sido azotados por situaciones naturales como inundaciones, desbordamientos de los ríos y presas en donde muchas personas han muerto y otras han perdido todos sus patrimonios que reunieron, tras años de esfuerzo.
Explicó que " luego de haber llegado hasta este lugar, donde nos hemos reunido sin importar las clases sociales o el color de la piel, nuestra fe se a renovado porque hemos recibido a Cristo nuestro Señor".
Finalmente solicitó a los jóvenes “comportarse”, ya que en años anteriores muchos de los jóvenes luego de refrendar su fe católica llegan a otros lugares donde perdían la cordura.
Abundó que no es bueno realizar situaciones antisociales en durante sus regresos a casa ni abusar de las bebidas alcohólicas puesto que los jóvenes que integran la marcha deben recordar que llegaron hasta el Cerro del Cubilete para comprometerse ante cristo rey a ser mejores personas.
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