Por: Roberto López , Domingo, 19 de Agosto de 2007
Con una superficie de 13 mil 270 hectáreas cuenta con los elementos suficientes para ser un zona turística
SAN DIEGO DE LA UNIÓN
Aunque el área natural protegida de Peña Alta tiene el potencial para atraer turismo y facilitar la generación de recursos, no puede concretarse debido a que el camino de acceso es casi intransitable para un automóvil; quienes llegan hasta la zona de la peña viajan en camionetas y aunque esto es conocido por las autoridades, para este año no hay un proyecto de mejora.
Laura Ruth Martínez Reyna, coordinadora de Ecología y Turismo del Municipio, dijo que la zona de Peña Alta ofrece una variedad aceptable de actividades para atraer y potenciar el turismo.
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Sin embargo, la inversión para esta zona ha sido pobre. La última fue en 2004 para la construcción de cabañas de investigación, las cuales se terminaron a inicios del 2005, pero no se usaron con este fin.
Se edificaron siete cabañas que cuentan con todos los servicios, pero no están equipadas. Actualmente se ofrecen a la renta para que los visitantes puedan quedarse en ellas a manera de excursión.
Cada cabaña puede albergar entre 7 y 10 personas, pero no tienen ningún mueble; quienes las rentan deben llevar sus propios implementos para pasar la noche. "No ha habido recursos para equiparlas debidamente; se terminaron en la anterior administración pero no se ha podido terminarlas", dijo Martínez Reyna El principal problema, explicó la funcionaria, es adecuar el camino para que puedan acceder más visitantes.
"Lo más urgente es un proyecto para el camino. De San Juan a San Franco son como tres kilómetros y de ahí a los baños son como 10; el problema es que de por sí el camino es muy accidentado y en épocas de lluvia se vuelve prácticamente inaccesible".
Sin camino, no Laura Ruth Martínez dijo que aunque ha habido esfuerzos para promocionar la zona y ofrecer diferentes actividades, "no se puede establecer un programa de ecoturismo sin un camino de acceso; y es que incluso para llegar a la primer palapa hay un arroyo que solamente con camioneta se puede pasar, ya no se diga para llegar a la presa o a las cabañas", dijo.
Dio a conocer que hace una semana personal del Instituto de Ecología y de la Secretaría de Desarrollo Turístico visitaron el área natural protegida para ver qué productos turísticos ofrece.
"Y aunque Peña alta es el principal atractivo de la ciudad, tuvimos que meter otro proyecto ante la falta de camino", dijo Explicó que ingresaron un proyecto denominado Paseo Recreativo y Cultural San Miguelito y Presa de Antonio.
"Se trata de algo más bien cultural y religioso para las familias; elegimos este proyecto porque a diferencia de Peña Alta, este lugar está muy cerca, a medio kilómetro de la cabecera municipal.
El lugar está abandonado, pretendemos rescatarlo y promocionarlo", explicó.
Pocas excursiones La funcionaria dijo que la última inversión en Peña Alta fue directamente del Instituto de Ecología del Estado para construir palapas en la presa de San Franco, así como 150 mil pesos para la compra de lanchas, chalecos salvavidas y cañas de pescar.
"Sin embargo no tenemos excursiones masivas; la promoción que se hace de la zona es a través de posters, dípticos y la que hace el gobierno del estado a través de internet; la gente que llega es la que se entera del lugar por algún póster, gente del municipio o de municipios cercanos", dijo.
Mencionó que además del aspecto turístico, se han realizado trabajos de conservación y reordenamiento de la flora y la fauna. "La primera etapa fue la instalación de baños secos, además por parte de la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado, se instaló una caseta de vigilancia", indicó.
Dijo que al mes, las visitas al lugar se limitan a unas 50 personas, aunque señaló que en semana santa o días festivos el lugar ha llegado a albergar hasta a 500 personas.
El manejo, protección y custodia del lugar pertenece a la Asociación Civil Peña Alta, de la cual es presidente Juan Hernández Rocha. La entrada al lugar tiene un costo de 10 pesos que, a decir, de Laura Ruth Martínez, solamente sirven para pagarle a alguien que recoja la basura.
"La derrama económica es mínima, la asociación no recibe ganancias de eso; además, aunque la integra mucha gente, los que se hacen cargo son solamente cuatro porque muchos están trabajando en Estados Unidos", confesó.
Es decir, que sin el trabajo de la asociación al 100 por ciento y sin un proyecto para hacer transitable el camino, la zona seguirá desperdiciada a pesar de tener todos los atractivos turísticos.
Antecedentes y atractivos El área natural protegida de Peña Alta tiene una superficie de 13 mil 270 hectáreas y está ubicada a 12 kilómetros al poniente de la cabecera municipal.
Fue el 06 de junio del año 2000 cuando se decretó como área natural protegida, en categoría de uso sustentable. En esta sierra hay atractivos naturales como la cascada del salto Prieto, El Venero de los Palos Verdes, la cascada de La Sierrita, la mina del Mudo, pinturas rupestres y baños de Tesmacalli.
Tiene bosques de pino piñonero, pingüica de encino y matorral espinoso. Es habitad de animales silvestres como el venado de cola blanca, cacomixtle, zorra gris, mapache, tejón, águila, halcón cola roja, codorniz y guajolote silvestre.
Se ofrecen actividades como caminatas, excursiones, campismo, días de campo, fotografía de paisaje, paseos a caballo, pesca deportiva, renta de cabañas y palapas a la orilla de la presa San Franco.
Con una superficie de 13 mil 270 hectáreas cuenta con los elementos suficientes para ser un zona turística
SAN DIEGO DE LA UNIÓN
Aunque el área natural protegida de Peña Alta tiene el potencial para atraer turismo y facilitar la generación de recursos, no puede concretarse debido a que el camino de acceso es casi intransitable para un automóvil; quienes llegan hasta la zona de la peña viajan en camionetas y aunque esto es conocido por las autoridades, para este año no hay un proyecto de mejora.
Laura Ruth Martínez Reyna, coordinadora de Ecología y Turismo del Municipio, dijo que la zona de Peña Alta ofrece una variedad aceptable de actividades para atraer y potenciar el turismo.
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Sin embargo, la inversión para esta zona ha sido pobre. La última fue en 2004 para la construcción de cabañas de investigación, las cuales se terminaron a inicios del 2005, pero no se usaron con este fin.
Se edificaron siete cabañas que cuentan con todos los servicios, pero no están equipadas. Actualmente se ofrecen a la renta para que los visitantes puedan quedarse en ellas a manera de excursión.
Cada cabaña puede albergar entre 7 y 10 personas, pero no tienen ningún mueble; quienes las rentan deben llevar sus propios implementos para pasar la noche. "No ha habido recursos para equiparlas debidamente; se terminaron en la anterior administración pero no se ha podido terminarlas", dijo Martínez Reyna El principal problema, explicó la funcionaria, es adecuar el camino para que puedan acceder más visitantes.
"Lo más urgente es un proyecto para el camino. De San Juan a San Franco son como tres kilómetros y de ahí a los baños son como 10; el problema es que de por sí el camino es muy accidentado y en épocas de lluvia se vuelve prácticamente inaccesible".
Sin camino, no Laura Ruth Martínez dijo que aunque ha habido esfuerzos para promocionar la zona y ofrecer diferentes actividades, "no se puede establecer un programa de ecoturismo sin un camino de acceso; y es que incluso para llegar a la primer palapa hay un arroyo que solamente con camioneta se puede pasar, ya no se diga para llegar a la presa o a las cabañas", dijo.
Dio a conocer que hace una semana personal del Instituto de Ecología y de la Secretaría de Desarrollo Turístico visitaron el área natural protegida para ver qué productos turísticos ofrece.
"Y aunque Peña alta es el principal atractivo de la ciudad, tuvimos que meter otro proyecto ante la falta de camino", dijo Explicó que ingresaron un proyecto denominado Paseo Recreativo y Cultural San Miguelito y Presa de Antonio.
"Se trata de algo más bien cultural y religioso para las familias; elegimos este proyecto porque a diferencia de Peña Alta, este lugar está muy cerca, a medio kilómetro de la cabecera municipal.
El lugar está abandonado, pretendemos rescatarlo y promocionarlo", explicó.
Pocas excursiones La funcionaria dijo que la última inversión en Peña Alta fue directamente del Instituto de Ecología del Estado para construir palapas en la presa de San Franco, así como 150 mil pesos para la compra de lanchas, chalecos salvavidas y cañas de pescar.
"Sin embargo no tenemos excursiones masivas; la promoción que se hace de la zona es a través de posters, dípticos y la que hace el gobierno del estado a través de internet; la gente que llega es la que se entera del lugar por algún póster, gente del municipio o de municipios cercanos", dijo.
Mencionó que además del aspecto turístico, se han realizado trabajos de conservación y reordenamiento de la flora y la fauna. "La primera etapa fue la instalación de baños secos, además por parte de la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado, se instaló una caseta de vigilancia", indicó.
Dijo que al mes, las visitas al lugar se limitan a unas 50 personas, aunque señaló que en semana santa o días festivos el lugar ha llegado a albergar hasta a 500 personas.
El manejo, protección y custodia del lugar pertenece a la Asociación Civil Peña Alta, de la cual es presidente Juan Hernández Rocha. La entrada al lugar tiene un costo de 10 pesos que, a decir, de Laura Ruth Martínez, solamente sirven para pagarle a alguien que recoja la basura.
"La derrama económica es mínima, la asociación no recibe ganancias de eso; además, aunque la integra mucha gente, los que se hacen cargo son solamente cuatro porque muchos están trabajando en Estados Unidos", confesó.
Es decir, que sin el trabajo de la asociación al 100 por ciento y sin un proyecto para hacer transitable el camino, la zona seguirá desperdiciada a pesar de tener todos los atractivos turísticos.
Antecedentes y atractivos El área natural protegida de Peña Alta tiene una superficie de 13 mil 270 hectáreas y está ubicada a 12 kilómetros al poniente de la cabecera municipal.
Fue el 06 de junio del año 2000 cuando se decretó como área natural protegida, en categoría de uso sustentable. En esta sierra hay atractivos naturales como la cascada del salto Prieto, El Venero de los Palos Verdes, la cascada de La Sierrita, la mina del Mudo, pinturas rupestres y baños de Tesmacalli.
Tiene bosques de pino piñonero, pingüica de encino y matorral espinoso. Es habitad de animales silvestres como el venado de cola blanca, cacomixtle, zorra gris, mapache, tejón, águila, halcón cola roja, codorniz y guajolote silvestre.
Se ofrecen actividades como caminatas, excursiones, campismo, días de campo, fotografía de paisaje, paseos a caballo, pesca deportiva, renta de cabañas y palapas a la orilla de la presa San Franco.
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